¨Nuestra vida¨ es realmente la parte de nuestra vida donde elegimos enfocarnos.
Y ese foco nos condiciona totalmente, porque al elegir dónde ponemos nuestra atención, también estamos eligiendo – consciente o inconscientemente – los sentimientos que vamos a experimentar.
°
Las emociones no surgen por casualidad; son la respuesta a cómo interpretamos aquello que vemos. Nosotros las activamos con los pensamientos que sostenemos.
¨Todo pensamiento produce forma en algún nivel¨ – Un Curso de Milagros.
En el momento en que empezamos a entender que nuestro mundo interno le da forma al mundo que vemos, y no al revés, nuestra realidad cobra otra dimensión.
Aparece el famoso libre albedrío reconociendo que podemos decidir qué significado le damos a cada situación de nuestra vida, y retomar así el control de nuestro estado emocional.