¨Y sólo resta agradecer la inspiración.¨

Porque aún en medio de esa montaña rusa de emociones, de todos esos movimientos incómodos, podemos ver que la Vida, a través de diferentes escenas y personas nos sirve, una y otra vez, de inspiración para elevarnos por sobre nosotros mismos…para volver a VER.

Verlo todo con otros ojos, sabiendo que, en medio del aparente caos, hay siempre un gran tesoro.

¨Inspiración¨ también como la pausa para inspirar y contemplar toda esa red, perfectamente orquestada, y comprender el mensaje.

¨Inspiración¨ para todos estos Viajes de sanación profunda, que luego de cada lágrima de liberación, traen agradecimiento, y esas aguas se tornan dulces. Junto con el pensamiento de: ¨claro que hay otra manera, claro que puede ser diferente.”

Siempre hay lugar para más Amor, pero tenemos que hacer espacio. Reconocer que estamos ¨llenos¨ de lo que no queremos más, de lo ya no nos sirve para quienes queremos ser, o para lo que realmente Somos.

Entender que nos acostumbramos a esa manera, pero sólo por costumbre, no por preferencia ni deseo.

Pero cuando hay Hambre de más, ganas de más Vida, cuando los ¨Sí¨ son más fuertes que los ¨No¨…la Magia empieza a operar.

Sostenernos en nuestra Luz es sostenernos en el Amor, y allí no hay rencor, ni tristeza ni enojo. Esas emociones sólo nos impulsan, al principio, para movernos.

Sostenernos en nuestra Luz es entender que el otro sólo nos muestra el camino para volver a uno. Es el mensajero que levanta el espejo y no más que eso.

Asi que GRACIAS a todos los que nos desafian e incomodan por servir de inspiración para volver a Casa.

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Sobre mí...

Mi nombre es Mercedes Zubiarrain, tengo 40 años, y nací y vivo en Buenos Aires. Aunque parezca ya de otra vida, alguna vez estudié y me recibí de Publicidad. Tuve siempre mi lado B que me llevaba a incursionar en talleres de Reiki, Registros Akáshicos, meditación…

Tuve algunos emprendimientos hasta que por fin entendí de qué iba la cosami cosa. Cambié “producto” por “servicio” y me convertí yo en la materia prima. Me la jugué.

Mi lado B se transformó en todos mis lados, y ya no hubo vuelta atrás. La puerta de entrada fue la Decodificación Bioemocional, que luego me llevó a conocer la Nueva Medicina Germánica, SAAMA…y es un camino que nunca termina.

Hoy me dedico a acompañar personas en Casa Florida 1336, que es el espacio físico que me unió con Mujeres, hermanas de otras vidas, con las que comparto el viaje también en ésta. Voy y vengo por muchos lugares – Chamanismo, Plantas Medicinales, Física Cuántica, Un Curso de Milagros, Constelaciones Familiares…investigo, quiero ¨comprender¨, y así es que voy poniéndole el cuerpo a todo lo que, en cada momento, resuena. Porque ¿qué es la Vida sino experiencias vividas?

Y no soy escritora pero escribir me da placer. Y sigo al placer. Escribir es el ritual y la práctica desde donde me miro, me transformo. Es mi propia medicina.