Hay una idea que escuché hace poco que me parece preciosa: deslealtad dichosa (@joan.garriga.bacardi )
Es disruptiva, claro que sí.
Toca lugares muy profundos, e inconscientes, que tienen que ver con la pertenencia, con el sentirnos parte, el ser aceptados…
Se refiere a este proceso de ¨individuación conciente¨ que, en algún momento, atraviesa nuestro camino.
Avanzar hacia nuestro destino, el propio, que no es repetición de los anteriores…o, por lo menos, no debería serlo.
Deslealtad dichosa es este movimiento hacia una mayor conciencia donde comprendemos que sacrificarnos por los anteriores, por sus historias de sufrimiento, no les representa mayor felicidad. Muy por el contrario.
Acá entran todos esos patrones que constantemente se repiten en nuestra vida: temas de salud, problemas con la pareja, falta de dinero…
Cada vez que habitamos la plenitud, la satisfacción, el disfrute, el amor, todo nuestro sistema familiar – en el plano del alma – lo celebra.
Y para llegar a esta instancia de poder permitirnos ser diferentes y saber que somos mirados con buenos ojos, tenemos que estar primero en el agradecimiento incondicional y la honra a lo que fue, a nuestras raíces.
Honrar y agradecer para avanzar con fuerza.
Y como somos parte de un ¨sistema¨, cuando ordenamos y nos transformamos, cuando traemos nueva información, los beneficios son para todos.
