Le dije ¨te acompaño?¨

Le dije ¨te acompaño?¨
Me miró y, sin dudarlo, respondió ¨Sí, dale¨.

Wow. ¨Estamos regalados¨ pensé.
Sonreí por dentro.

Ahí mismo me di cuenta que ya no queríamos ser los mismos…
y ya no lo éramos.

El plan de egos ofendidos ya no era plan.
Lo agarramos a tiempo – fue justo ahí cuando el guión tomó otro rumbo.

°
Me disponía a meditar.
Pero entendí que salir a buscarlo, estar disponible, era la verdadera práctica espiritual.
Mucho más potente que cualquier otra.

Reconocí que una parte mía ya no quería el conflicto.
Y seguí ese impulso biológico, esa profunda necesidad, casi sin pensarlo.

No quería darle tiempo a que el personaje se despertara y me alejara de esa naturaleza tan sabia que me había puesto en movimiento.

°
Pero como Todo es Todo…al instante aparece la paradoja – la hermosa comprensión – de que ¨lo otro¨ también era amor. Distorsionado, pero amor al fin.

Porque estamos todo el tiempo en busca de esa conexión profunda, genuina.
Venimos de ahí. Es inevitable.

Lo que sucede es que, a veces, responde primero nuestra humanidad herida.
Y parecería que busca todo lo contrario, pero sólo se está protegiendo.
Todos estamos pidiendo a gritos amor y más amor…porque no podemos escapar de los que somos.

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Sobre mí...

Mi nombre es Mercedes Zubiarrain, tengo 40 años, y nací y vivo en Buenos Aires. Aunque parezca ya de otra vida, alguna vez estudié y me recibí de Publicidad. Tuve siempre mi lado B que me llevaba a incursionar en talleres de Reiki, Registros Akáshicos, meditación…

Tuve algunos emprendimientos hasta que por fin entendí de qué iba la cosami cosa. Cambié “producto” por “servicio” y me convertí yo en la materia prima. Me la jugué.

Mi lado B se transformó en todos mis lados, y ya no hubo vuelta atrás. La puerta de entrada fue la Decodificación Bioemocional, que luego me llevó a conocer la Nueva Medicina Germánica, SAAMA…y es un camino que nunca termina.

Hoy me dedico a acompañar personas en Casa Florida 1336, que es el espacio físico que me unió con Mujeres, hermanas de otras vidas, con las que comparto el viaje también en ésta. Voy y vengo por muchos lugares – Chamanismo, Plantas Medicinales, Física Cuántica, Un Curso de Milagros, Constelaciones Familiares…investigo, quiero ¨comprender¨, y así es que voy poniéndole el cuerpo a todo lo que, en cada momento, resuena. Porque ¿qué es la Vida sino experiencias vividas?

Y no soy escritora pero escribir me da placer. Y sigo al placer. Escribir es el ritual y la práctica desde donde me miro, me transformo. Es mi propia medicina.