Percibir lo que 𝘌𝘴 vs Percibir lo que 𝘚𝘰𝘮𝘰𝘴.
El cambio de una sola palabra puede generar realidades totalmente opuestas.
Y acá entran en juego varios aspectos.
Comprender, por un lado, que 𝘯𝘰 𝘴ó𝘭𝘰 somos responsables por aquello que percibimos.
Estamos totalmente implicados.
Nos reflejamos en ¨eso¨.
Desde un nivel podemos decir que Somos Eso que percibimos y, a la vez, no lo somos.
Siempre la ¨verdad¨ es una verdad a medias, porque depende el desde dónde se parta.
Lo que podemos decir es que 𝘴𝘰𝘮𝘰𝘴 aquello que percibimos, en tanto le hemos dado un significado a todo aquello que vemos – sean personas, objetos, situaciones.
No vemos lo que está ahí, sino que a todo lo cargamos con las experiencias que hemos vivido, con toda nuestra programación…es decir, con nuestro pasado.
Por eso el verdadero Viaje es interior.
Aprehendemos lo que hemos aprendido para desaprenderlo.
Se requiere Presencia y Voluntad.
Es una aventura que tiene el potencial para acercarnos a Casa…
o mejor dicho, para que nos demos cuenta que ya estamos ahí.
Que siempre estuvimos ahí y que fuimos nosotros los que, con persistencia, lo negamos.
